Aprender a gestionar el conocimiento es un acto de cuidado hacia tu yo del futuro.

Si lees, haces cursos, tienes intereses diversos, escribes, tienes conversaciones, reuniones, creas cualquier cosa… ya estás gestionando conocimiento. Pero, ¿sientes que te funciona la forma en la que lo haces, es sostenible?

¿O te sientes abrumada por la ola de información que te llega cada día?

 

¿Qué es un sistema de gestión del conocimiento?

Es un conjunto de herramientas, actitudes, hábitos y procesos que te permiten guardar, tratar e interactuar con la información que consumes en un mismo sitio y siguiendo unos principios para poder rescatarla cuando te haga falta y aplicarla en tu día a día.

El corazón de tu sistema será cualquier aplicación de notas.

Las ventajas de usar una aplicación pensada para tomar notas son muchas: te permiten externalizar tus ideas en un mismo sitio, ideas que puedes conectar para incubar otras.

Hay muchas opciones y pronto habrá muchas más, pero para empezar échales un vistazo a Evernote, Notion, Obsidian, OneNote y compáralas.

 
 

Mi camino

Cada vez que empezaba un curso, una asignatura o cualquier hobby o aventura intelectual importante, me compraba una libreta nueva. Una bonita, con papel bueno.

Dentro de mí algo me decía que separar el conocimiento de esta manera, en silos, lejos de todas las otras valiosísimas ideas de otras libretas no tenía ningún sentido.

En 2018 me encontré con Tiago Forte por estos sitios bonitos de internet y me apunté a su curso Building a Second Brain. Tiago propone una serie de principios que le dan la vuelta a todo lo que yo había leído y creído hasta entonces sobre cómo tratar la información. Mis sospechas se confirmaron: lo de las libretas no tenía ningún sentido, no era sostenible.

Un año después traduje el libro El método Zettelkasten de Sönke Ahrens, en el que el autor profundiza sobre los principios de la gestión del conocimiento.

Tres principios básicos de la gestión del conocimiento:

 

Para pensar hay que escribir.

La escritura de notas es el medio que nos permite externalizar nuestro pensamiento y dejarlo plasmado en un mismo sitio. Así nos queda bancha anda para desarrollar y conectar ideas.

Nunca más vas a empezar de cero

Enfrentarte a la pantalla en blanco cada vez que empiezas a trabajar es desmoralizante. Con una colección de notas con hilos de los que ir tirando nunca vas a tener que empezar de cero.

Básate en principios y no en herramientas

Las aplicaciones van a seguir evolucionando a buen ritmo. Si tu sistema se basa en principios sólidos no va a afectarte tener que cambiarte o que te hagan cambiarte de aplicación.

Te enseño todo lo que sé sobre la gestión del conocimiento en los artículos del blog y los cursos/sesiones de coaching que imparto: